Las nuevas tecnologías han cambiado notablemente la forma de entender el mundo y la manera en que se desenvuelven gran parte de las relaciones económicas y sociales de las personas. Ya si desde la revolución industrial se empezó a instaurar una conciencia de salario retribuido por trabajar unas determinadas horas, hemos visto como actualmente las retribuciones salariales ya no solo dependen de ciertas cantidades de dinero, si no también de otros complementos que en pocos años pretenden igualar e incluso sustituir al dinero como lo conocemos tal. Estamos hablando como no, de las criptomonedas y como no, de los Bitcoin.
El desconocimiento actual de este tipo de moneda es total por gran parte de la población, la cual ve a esta moneda como algo tan etéreo y ficticio que en muchos casos puede entenderse como algo poco fiable. Sin embargo estamos viendo como muchos profesionales, especialmente de las nuevas tecnologías, están comenzando a obtener retribuciones con este tipo de moneda por lo que la pregunta que nos asalta parece obvia: Puedo trabajar en Europa y cobrar mi sueldo en Bitcoin. Ya sea en países como España, donde podemos adquirir vía Bitcoin España u otros sitios este tipo de moneda, pasando por otros países como Suecia o Alemania, donde también empiezan a desarrollarse esta cripto monedas.
Cobrar en bitcoin es ya una realidad para muchos profesionales
Esta moneda ya se ha adaptado con firmeza en muchos países y profesionales, como una perfecta forma de recibir dinero y realizar pagos. Un buen ejemplo es empresas de jugadores de Free Fire competitivo, donde en su página web es posible conocer todas las actividades y torneos, así como las partidas de este equipo profesional de jugadores, que ya tienen esta moneda como un referente a la hora de comprar e invertir.
La confusión de muchas administraciones sobre la gestión de este tipo de monedas y su validez en el marco legal de muchos casos es bastante amplio. Un ejemplo lo podemos observar en la situación vivida por un ciudadano sueco, Hedquvist, el cual planteó la posibilidad de desarrollar sus servicios profesionales basándose en esta nueva moneda, solicitando para ello la posibilidad de desarrollar las tributaciones correspondientes al iva. La decisión de la administración fue de luz verde para poder utilizar esta moneda como un medio de pago más y por lo tanto como una posibilidad válida de poder cobrar un sueldo en bitcoin y por lo tanto trabajar a cambio de esta retribución salarial.
La jurisprudencia en Europa sobre este tema parece ser bastante clara, ya que entiende que el Bitcoin logra a entrar en el grupo de las monedas convencionales y por lo tanto a gozar de los mismos derechos y deberes de estas. Desde hace pocos meses el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha decidido que el bitcoin y otro tipo de monedas virtuales pueden llegar a ser intercambiadas de una manera libres de impuestos en todo el espacio Europeo, por lo que las monedas virtuales deben ser consideradas del mismo modo que las monedas convencionales que hay en otros países que gocen o no de monedas como el euro o a libra.
La confusión de muchas administraciones sobre la gestión de este tipo de monedas y su validez en el marco legal de muchos casos es bastante amplio. Un ejemplo lo podemos observar en la situación vivida por un ciudadano sueco, Hedquvist, el cual planteó la posibilidad de desarrollar sus servicios profesionales basándose en esta nueva moneda, solicitando para ello la posibilidad de desarrollar las tributaciones correspondientes al iva. La decisión de la administración fue de luz verde para poder utilizar esta moneda como un medio de pago más y por lo tanto como una posibilidad válida de poder cobrar un sueldo en bitcoin y por lo tanto trabajar a cambio de esta retribución salarial.
La jurisprudencia en Europa sobre este tema parece ser bastante clara, ya que entiende que el Bitcoin logra a entrar en el grupo de las monedas convencionales y por lo tanto a gozar de los mismos derechos y deberes de estas. Desde hace pocos meses el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha decidido que el bitcoin y otro tipo de monedas virtuales pueden llegar a ser intercambiadas de una manera libres de impuestos en todo el espacio Europeo, por lo que las monedas virtuales deben ser consideradas del mismo modo que las monedas convencionales que hay en otros países que gocen o no de monedas como el euro o a libra.
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