Hace pocos días se ha publicado en la prensa una medida impulsada desde Berlín , donde se esta estudiando la posibilidad de echar a los extranjeros y ciudadanos comunitarios que no logren poseer un puesto de trabajo entre los tres y los seis meses posteriores a sus presencia en Alemania. Una controvertida medida que pone en duda la libre circulación de trabajadores y mercancía en territorio común europeo.
Bajo la excusa de luchar contra la inmigración de la pobreza, Alemania trata de limitar o de evitar el abuso que muchos ciudadanos europeos de países como de Bulgaria o de Rumania, abusen de las medidas sociales y ayudas que hay en el país para aquellos ciudadanos de la unión. Por lo visto se ha detallado un aumento excesivo en la solicitud de este tipo de ayudas sociales, lo que ha motivado que haya saltado las alarmas en el país ante estos abusos.
Con el fin de poner solución al fraude social que muchos ciudadanos hacen de las instituciones oscilase alemanas, las cuales proveen de generosas medidas en forma de ayuda económica, se está mirando identificar de manera fiscal a cada persona que solicite estas ayudas para de esta manera poder llevar un mayor control de estas y de sus familias, así para poder evitar que se produzcan fraudes a la hora de solicitar estas ayudas.
La medida se ha planteado para un grupo muy específico de ciudadanos europeos sospechosos de ejercer un turismo social en Alemania, pero bien podría afectar a otros ciudadanos del resto de países europeos que tratan de encontrar trabajo en Europa y en Alemania concretamente, ya que la idea de expulsar a aquellos ciudadanos de la unión que no logren obtener un trabajo antes de los seis meses, podría afectar a muchos españoles, italianos o griegos que buscan poder trabajar en Alemania de una manera legal
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